Lódolo explicó que con los casos de muerte súbita en el deporte, “conviene enfatizar las precauciones para proteger su salud cardiovascular de los atletas”.
“Hay una línea de trabajo que encabeza la Sociedad de Cardiología provincial, acompañada por la Agencia Entre Ríos Deporte, con muchos consultorios en el interior, que pretenden prevenir y detectar patologías que podrían ocasionar accidentes o muertes súbitas durantes los entrenamientos o las competencias”. “la primera experiencia se realizó por primera vez en Nogoyá, a raíz de fallecimientos de niños en la cancha, que estaban sobre medicados porque eran asmáticos y no había ningún tipo de control. La experiencia fue creciendo y así nos fuimos perfeccionando”.
Luego se realiza un examen físico completo del deportista en el que se tiene en cuenta la talla, el peso, el percentil que predomina en el momento del chequeo; una prueba traumatológica mínima en dónde se tratan de establecer patologías del pie, discrepancias en los miembros inferiores o patologías de columnas; evaluación de agudeza visual; análisis completo de respiración; una entrevista para conocer si usa cepillo dental y visita periódicamente al odontólogo, el alimento que ingiere y la cantidad de líquidos. “En forma obligatoria, esta historia clínica tiene un electrocardiograma que es muy importante, ya que se pueden detectar muchos problemas que están latentes y no están presentes en los antecedentes personales o familiares y no se detectan con el estetoscopio. La toma de presión y la auscultación del corazón y la respiración tienen un valor muy importante ya que hacen a la detección de soplos o de arritmias u otros factores que podrían devenir en problemas mayores”, explicó el profesional.
El especialista indicó que si se detectara una anomalía se define el grado de problemas que presenta y se actúa en consecuencia. “Hay diez causas que se encuentran dentro de las posibles patologías de muerte súbita. Detectadas dan lugar a la recategorización del deportista para que practique otra disciplina o para que haga un deporte que no sea competitivo”.
“existe consenso entre los médicos de Entre Ríos relacionado con la importancia de desarrollar una historia clínica médico-deportiva completa para todos los deportistas federados. En ella se incluye una entrevista en la que se consideran los datos personas del deportistas, la edad, las enfermedades padecidas, los antecedentes familiares que podrían estar relacionados con problemas crónicos que luego producen la temible muerte súbita”. En el examen también se consulta si el deportista está medicado; si es diabético, asmático, neurológico convulsivo o epiléptico. “Todos esos datos corroboran el riesgo que podría tener el deportista según la edad y la exigencia del deporte que practica. Todo sirve para determinar el otorgamiento de una licencia que debe tener una validez anual”, advirtió.
Aquí sigo esperando con paciencia que algún mortal se digne a contarnos su experiencia en un reconocimiento médico OBLIGATORIO en el fútbol gállego. ¿Nadie lo ha pasado?.
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